Todo comenzó a la una del mediodía, los posos del te
bailaban en el fondo de esa taza ligeramente ovalada de la pizzeria italiana en
la que me encontraba, posos que sin yo saber interpretarlos me hablaban sobre
mi futuro inmediato . La verdad es que no tenia hambre pero tampoco tenía
ninguna gana de levantarme y enfrentarme a mi destino. En un alarde de valentía
decidí levantarme, pagar y dirigirme hacia mi inevitable final. De un modo u
otro tenía que escapar, no podía rendirme sin más… no podía entregarme a las
fuerzas del orden tan facilmente, no al menos sin haber luchado antes. Yo que
había sido grande en esos días no tan pasados, yo que había triunfado entre los
grandes, yo que habia sido querido de algún modo… y ahora miradme, escribiendo
en una servilleta de papel mis pensamientos y mi historia para que algún día
alguien sepa que soy inocente.
Quisiera poder ser libre de pensar y actuar en el momento
que a mi me plazca, quisiera correr sin
mirar atrás,pero tengo que vivir esta vida que me han impuesto. Me muerdo las
uñas, le doy mil vueltas y sin más me paro en la puerta, un sudor frío recorre
todo mi cuerpo. Es una sensación horriblemente desagradable. Salgo por la
puerta y no hay nadie, ¿ será una emboscada? Sigo caminando despacio pero sin
pausa, debo pasar desapercibido ante los ojos de la gente sin dejar huella en
este mundo oscuro y vacío. Me dirijo a un callejón tan negro como la noche, me
siento, enciendo un cigarro y pienso en como empezó todo y la verdad es que no
me acuerdo, lo único que recuerdo es estar huyendo de algo que me atemorizaba,
algo que me perseguía en las sombras y no dejaba verse a la luz. Quien sabe lo que es en realidad, ¿la
policía, el fbi, la mafia? No lo se, yo solo se que quiero que todo acabe. De repente
todo da vueltas y se nubla a mi alrededor, oigo voces pero no se lo que quieren
decirme, quiero gritar pero no puedo y unas manos grandes me arrastran hasta el
fondo de algún lugar siniestro para saber que hacerme.
En mi mente sigo
despierto pero mi cuerpo no se mueve, no reacciona a mis ordenes y eso me
frustra sobremanera. Al fin todo para y parece serenarse pero sigo sin poder
mover un maldito musculo de mi cuerpo. Las voces siguen ahí y no parece que
vayan a cesar y empiezo a dudar si están en mi mente o en el exterior, me estoy
volviendo loco.
Poco a poco me voy despertando y me percato que estoy en el
mismo sitio ¿ habrá sido todo un sueño? ¿ será fruto de la medicación? No lo
se, es todo tan difuso que me da miedo. No me falta nada en los bolsillos y no
tengo ninguna señal de forcejeo, simplemente estaba ahí igual que antes solo
que unas horas en el futuro. La noche amenazaba con abalanzarse sobre el cielo
y yo no tenía un lugar en el que dormir ni una mesa con comida caliente que me
esperara, estaba solo, solo y desamparado, sin nada que perder.
Un rostro desconocido
aparece en el angosto callejón, un rostro curtido por la edad y el paso del
tiempo, el mismísimo rostro de la muerte diría yo,me sonrió con la más extraña
de las sonrisas y de pronto se
desvaneció al igual que apareció. Todo me parecía un sueño ¿ y si aún seguía
tirado en el sueño y todo esto era un sueño febril?. Cada vez me sentía más y
más débil, la aparición de ese ser se llevó mi fuerza vital o eso parecía. Intenté
desplazarme hasta un lugar a la vista para pedir ayuda pero las calles estaban
desiertas, no había ni un alma por esas calles antes abarrotadas por la
multitud.Me desplomo súbitamente y todo se derrite a mi alrededor,
todo parece cambiar sin estar cambiando y todo lo que parecía distinto se
vuelve igual. Oigo risas en mi cabeza risas y palabras que dicen “ ya te hemos
cogido, ya estamos aquí y de nosotros no se puede escapar” ¿ pero quienes eran
ellos? ¿ que querían de mi? ¿ que le esta pasando a mi cuerpo?? Definitivamente algo no marcha bien y la parálisis ha
vuelto a por mi para ser esta vez definitiva, mis ojos dejan de ver pero sigo
oyendo esas espantosas risas en mi cabeza que retumban como tambores ¿ es este
mi fin? mi oído se va dispersando poco a poco y ya no me siento ni en mi
cuerpo. Adiós mundo, adiós misterios que no llego a comprender, esta es la
muerte de un loco que murió por intentar huir de un enemigo que estaba dentro
de el y que acabaría por destruirle igualmente.